Lecturas y maestros de santa Teresa

Pablo Maroto, D. de,

Lecturas y maestros de santa Teresa

 Madrid, Editorial de Espiritualidad, 2009, 300 pp.

Mucho se está escribiendo sobre santa Teresa en estos últimos años. Ahora bien, no todo lo que se publica merece la pena, y mucho de ello no aporta prácticamente nada al quedarse en esos reinos de lo facilón, de lo espiritualista, de lo psicológico o sociosicológico sin nada que ver con santa Teresa y con planteamientos anacrónicos que incluso la desfiguran. Por eso, es de agradecer este libro que tiene una base muy seria de investigación, bien escrito (quiero decir que es muy claro) y que se enfrenta con un tema de evidente interés teresiano: el conocimiento del proceso de formación de Teresa, sus maestros, sus lecturas, en los diversos tiempos de su vida, de su experiencia espiritual, de los compromisos eclesiales de su obra.

Se disponía de estudios de muy diversa índole sobre la relación de la madre Teresa con maestros, consejeros, confesores de las principales órdenes religiosas, o con corrientes espirituales llegadas de lejos y difíciles, en ocasiones, de detectar. Se necesitaba, no obstante, una visión conjunta de todos ellos, o de los más decisivos, y esta demanda se ve satisfecha, hay que decir desde el principio que con competencia, con este libro de Daniel de Pablo Maroto.

Es posible que algunos hayan leído buena parte de sus contenidos, publicados por entregas, a lo largo de los últimos nueve años, en la revista Teresa de Jesús. El autor ha recogido aquellos artículos, los ha estructurado temática y cronológicamente, ha actualizado alguna citación, introducido leves aditamentos, más que cambios, en alguna ocasión, y así, con una introducción oportuna, ha elaborado este libro.

Es posible también que alguien, a la vista del título, piense solo en personas o en libros y lecturas. De ellos tratan estas páginas. Pero no sólo de ellos, puesto que en la formación y en la sensibilidad de Teresa actuaron también otras mediaciones como, por ejemplo, los ambientes en que vivió y que observó con su capacidad bien probada de asimilación. De hecho, el libro se abre con las presencias e influencias del ambiente familiar, con las enseñanzas de los padres, las lecturas de la infancia y de la adolescencia, el ambiente agustino de Santa María de Gracia personificado en una maestra decisiva, en doña María Briceño.

El apartado segundo, con un título poco expresivo, expone el magisterio de la Sagrada Escritura en Teresa de Jesús; lo que significó y fue el maestro interior, «el libro vivo», en una espiritualidad tan cristocéntrica como la suya; el recurso a María, como modelo espiritual de una mujer (con todo lo que implicaba este modelo contra el rechazo generalizado de la experiencia espiritual en las mujeres), o como madre de su orden, la del Carmelo. Como ejemplares también se propone a los santos de los que era tan devota quien, como Teresa, participó plenamente de la religiosidad popular, lo cual lleva a Maroto a incluir (y es un acierto el hacerlo) al demonio como maestro de quien fuera tan experta en el arte de espantarlo. Pero queremos insistir en otro magisterio tan cordial para ella y que capta el autor de libro a la perfección, el de san José: «quien no hallare maestro que le enseñe oración, tome este glorioso santo por maestro y no errará en el camino».

En el sector que engloba bajo el título de la tradición presenta a san Pablo, a los personajes bíblicos y evangélicos (mujeres y hombres), algunos tan expresivos para ella como la Samaritana o Marta y María, Elías y Eliseo. Y se detiene en los padres de la Iglesia que tanto la impresionaron y enseñaron también: Jerónimo, Agustín, San Gregorio Magno. En continuidad con lo anterior dibuja las lecturas de la literatura medieval que tuvieron tanto éxito, corriendo manuscritas o después, con velocidad inaudita, cuando la imprenta se apoderó de la «Vita Christi» Cartujano, la «Leyenda dorada» o «Flos sanctorum», y la Imitación de Cristo o, mejor dicho, «El contemptus mundi» que es como se llamaba entonces, como lo leyó y lo recomienda la madre Teresa.

La parte más amplia es la que se dedica a los maestros de las diversas órdenes religiosas (escuelas las llama el autor). Se corresponde con la realidad social del clero, más activo en este sentido de dirección y control de conciencias el regular que el secular. En relación con Teresa, llama la atención que entre tanto confesor como desfila por sus relaciones, por su vida, en el momento crítico de la Encarnación Gaspar Daza (y su amigo seglar Salcedo), es decir, los consejeros de Ávila, anden tan desatinados; y, en segundo lugar, que no aparezca ningún carmelita pese a la cercanía física de ambos conventos. Y sin embargo, la orden del Carmen fue un ámbito fecundo que compensó la carencia de los frailes. La ausencia se compensaría con la intensidad de los maestros (y alumnos) descalzos fray Juan de la Cruz y Gracián. Se detiene en los maestros y confesores de las escuelas u órdenes clásicas que la ayudaron en su camino, en su experiencia espiritual y con su magisterio: los dominicos, como los libros —que recomendaba— de Granada, los padres Ibáñez, Báñez, el más entrañable García de Toledo; los franciscanos, con libros que la animaron y con los que estaba de acuerdo o en desacuerdo (Osuna, Laredo, el venerado fray Pedro de Alcántara, etc.); los jesuitas, gracias a los cuales se liberó de consejos errados y pudo vivir y proclamar su cristocentrismo radical. En cuanto a los jesuitas, Cetina, Prádanos, Francisco de Borja, eran más modernos, tenían otros métodos que iban más con Teresa, que a su vez influyó en algunos de ellos (Baltasar Álvarez). Dentro de la escuela ignaciana incluye al Maestro Juan de Ávila, cuya carta sobre el espíritu de la Madre se valora, creo, más de lo debido ya que, bien leída, resulta bastante cicatera y prevenida. No tan presentes estuvieron los agustinos si bien, después, y sin que la conociera personalmente, con la Madre Teresa, con sus hijas y sus libros, se entusiasmaría fray Luis de León.

Como colofón casi, en la última parte va presentando los elementos naturales que tanto juego le dieron en sus imágenes, en sus metáforas, en su lenguaje. Y cierra todo con breves trazos en torno a los amigos. Entre tantos amigos y amigas a los que alude (una legión que pide otro libro), entre las amistades femeninas sólo se detiene en la tan eficaz y cordial doña Guiomar de Ulloa, en cuya casa aprendió de consejeros tan eximios, y en doña Luisa de la Cerda, gracias a la cual tomó decisiones convenientes para el estilo de vida de sus conventos y en cuyas mansiones se afianzó su postura social de rechazo de las aristocracias honrosas («aborrecí el desear ser señora»).

Hay que notar que la biografía de estos personajes suele cerrarse con el dibujo que de ellos traza la madre Teresa, y huelga advertir que algunos de estos retratos, como es bien sabido, son, sencillamente, magistrales.

Daniel de Pablo Maroto ha optado por publicar estos materiales, con unidad perfecta, tal y como aparecieron en la revista Teresa de Jesús (algunos hace nueve años). No hubiera estado de más alguna actualización, no tanto en el cuerpo de los capítulos cuanto en la bibliografía. Alguna, mínima, reiteración (por ejemplo cuando habla del padre Prádanos y de la amiga, de ambos, doña Guiomar) es comprensible al tratarse de artículos de revista inicialmente.

Es un libro, en definitiva, muy actual, serio y, además, muy legible puesto que está escrito con naturalidad y muy bien fundado como obra que es de uno de los más cualificados teresianistas. Me parece muy oportuno y una buena ayuda para una lectura integral e inteligente de santa Teresa en estos años previos al centenario de su nacimiento.

– Teófanes Egido

Nuño de santa María, Carmelita

López Melús, R. M.,

Nuño de santa María, Carmelita.
Un santo de ayer con un mensaje para hoy

AMACAR, Onda, 2009, 214 pp.

El 26 de abril de este año 2009 el santo Padre Benedicto XVI ha proclamado santo al Beato Nuño de Santa María, carmelita. un santo de ayer con un mensaje para hoy es lo que ha resaltado el P. Rafael María López Melús en este libro que ha sido publicado en vistas a esta canonización con el fin de dar a conocer la actualidad de un Carmelita del siglo XV que tiene una palabra de que decir a los Carmelitas del siglo XXI. Así lo ha presentado el P. Fernando Millán Romeral, General de la Orden del Carmen, en este libro, resaltando de la vida del nuevo santo su amor, casi romántico y caballeresco, por la vida cristiana en toda su plenitud. Amor que se ha hecho visible en la vida de san Nuño en su honda piedad eucarística, en la devoción tierna y filial hacia la Virgen María que plasmó de mil maneras y que será la que le llevará a ingresar el 15 de agosto de 1422 como hermano «donado» en la Orden del Carmen en la ciudad de Lisboa y en su verdadera humildad del héroe de Portugal y Condestable que ha pasado a ser el hermano donado que realiza los trabajos más humildes y sencillos del convento.

Esta es la vida sencilla de un gran santo que apenas es conocido fuera de su Orden y que con sencillez nos quiere presentar el P. Melus en este libro. La lectura del mismo es sencilla, aunque tenga un leguaje de hace unos cincuenta años, no por ello tiene desperdicio el contenido del mismo. Podemos encontrar interesantes noticias históricas digna de admiración y algunos ejemplos de vida cristiana y carmelitana que pueden ayudar al lector y lectora a imitar la vida de un santo que de Condestable pasó a ser el último de su comunidad religiosa.

– Celedonio Martínez Daimiel

Vida y trabajo

Grün, A.

Vida y trabajo.
Un desafío espiritual

Sal Terrae, Santander, 2007, 149 pp.

Estamos acostumbrados a que Anselm Grün —desde su dilatada experiencia— nos ilumine con sus libros sobre las distintas formas de vivir la espiritualidad cristiana en el mundo actual. Por eso dentro de su repertorio bibliográfico aún faltaba un trabajo como éste que cada vez más personas demandaban: conocer el sano equilibrio entre la Vida —con mayúsculas— y la vida laboral. En este sentido, la regla de san Benito encarna de forma armónica esta tensión que tantos conflictos genera al hombre moderno. Y a pesar de que Vida y trabajo bien podría ser una actualización del ora et labora benedictino, quien haya leído alguna obra de Anselm Grün sabrá que sus libros beben constantemente de muchas fuentes de espiritualidad así como de otras muchas ciencias humanas, y que además nos descubre, siempre de forma novedosa y enriquecedora, la experiencia de casos concretos que ayudan al lector a comprender de forma práctica sus profundas reflexiones.

El libro está dividido en cuatro bloques que nos ayudan a descubrir cómo la espiritualidad puede ser un buen camino para afrontar los distintos problemas de cada día. De hecho, la idea que su autor quiere transmitirnos consiste precisamente en mostrar que la espiritualidad vivida a lo largo de cada jornada más que una carga añadida, supone una verdadera fuente de paz y de alegría para realizar mejor todas las tareas.

En este sentido, Anselm Grün analiza en el primer capítulo las presiones, los miedos, las preocupaciones, la falta de tiempo, las frustraciones y otras dimensiones interpersonales como son el condicionamiento de los otros y la pérdida de sí mismo o el sentimiento de culpa, que representan los diferentes estados alterados de la existencia humana que muchas veces nos hacen perder el sano equilibrio en nuestro corazón. Las palabras de Grün nos ayudan a saborear el pensamiento de que Dios habita en ese espacio sagrado que se sustrae al mundo y que se encuentra dentro de cada uno de nosotros. En el segundo capítulo el autor se centra en las cuestiones que afectan a la toma de decisiones y a la manera de afrontar responsablemente sus consecuencias. Desde este punto de vista el escritor benedictino reflexiona sobre los éxitos y fracasos, el compañerismo, los conflictos de conciencia y otros desafíos actuales como son el mobbing, la competencia o el despido laboral. El tercer capítulo nos muestra el estímulo que supone vivir la espiritualidad cristiana en el trabajo profesional para ser mejores personas. Y por último en el cuarto capítulo, Grün nos presenta el trabajo como si se tratase de un verdadero desafío espiritual donde poder siempre glorificar a Dios. No en vano nuestra tarea profesional es el lugar en el que Dios ha querido que nos hagamos santos tal y como recordaba con frecuencia san Josemaría Escrivá de Balaguer, fundador del Opus Dei: «santificar el trabajo, santificarse en el trabajo, santificar a los demás con el trabajo». En definitiva, un libro que interesará a todos por tratar un tema tan actual como crucial.

– Pedro José Grande Sánchez

Transforma tu angustia

Grün, A.,

Transforma tu angustia.
impulsos espirituales para vencer tus miedos

Sal Terrae, Santander, 2008, 157 pp.

Comenzando a leer por la introducción podemos darnos cuenta que hoy vivimos en una sociedad que goza de más bienestar que en otros tiempos, sobre todo en los países ricos, y, que a pesar de los seguros a todo riesgo, muchas personas se sienten inseguras, angustiadas, acosadas por la soledad, enfermedades, muerte, miedos a fracasar en la vida y un futuro incierto. Aunque la angustia no es algo nuevo, pues siempre ha inquietado a los seres humanos, sin embargo nuestra sociedad se caracteriza por este sentimiento y el psicólogo W. Schmidbauer habla de la «generación de la angustia».

La angustia tiene muchos rostros, tantos como las personas afectadas. Cuando la angustia no es una energía vital positiva, nos encierra como en una cárcel, no nos deja vivir a plenitud y no nos deja ni vivir ni dormir. Grün, como buen maestro y pedagogo, nos invita a examinar nuestros sentimientos, a percibir lo que nos dice para poder liberarnos de ella o transformarla, así se convertirá para nosotros en fuente de vida, de veracidad, de claridad y de atención. Es cierto que sólo Dios puede calmar nuestra angustia, pero en ciertos momentos, necesitamos la compañía de un terapeuta o un padre espiritual, u otra persona para ayudarnos a manejarla mejor.

Hay muchos libros de psicología que nos hablan de la angustia. A. Grün, tan conocido en el mundo de la espiritualidad y, sobre todo, en esta editorial, nos presenta en este libro dieciocho artículos o reflexiones que tratan de la angustia en los distintos momentos de nuestra vida. Al final habla de la superación de la angustia en la oración y de que en el amor no hay angustia, ya que el amor echa fuera todo temor.

Anselm Grüm es uno de los autores de espiritualidad cristiana más leídos en la actualidad. Buen trabajo es el que se nos ofrece en estas páginas y no dudamos de que muchas personas se beneficiarán al leerlo.

– Eusebio Gómez Navarro

Serenar los días

Grün, A.,

Serenar los días.
Caminos hacia la quietud en vidas inquietas

Sal Terrae, Santander, 2009, 123 pp.

Ansel Grün, el prolífero y famoso escritor espiritual benedictino, nos brinda un nuevo libro en la colección de Sal Terrae «el pozo de Siquem» en el que nos muestra caminos para alcanzar la paz y la quietud interior, encontrarnos a nosotros mismos y ser capaces de abrirnos a lo que nos sostiene en esta vida.

El mundo que nos rodea tan cargado de palabras vanas, ruidos y miles de estrépitos sonidos que nos desequilibran interiormente son los que nos impiden el poder centrar nuestra mirada en la paz interior del alma. Para llegar a esta paz es necesario seguir las enseñanzas de los maestros del espíritu que nos invitan a buscar el silencio en nuestras vidas, silencio exterior y silencio interior, quietud del alma que ayuda a descubrir los tesoros que se esconden en lo más profundo de ser del hombre.

Hay una meta que se nos propone alcanzar, nos dice Ansel, y es la de poder acceder al espacio interior de sosiego. Para llegar a este espacio de sosiego hay que seguir los caminos naturales, que todos tenemos a nuestra disposición, la purificación de los sentidos en lenguaje sanjuanista, para luego pasar a los métodos tradicionales que se han ido desarrollando a lo largo de la tradición espiritual.

El libro lo ha dividido el autor en catorce capítulos y en cada uno de ellos ha ido tratando diferentes remas relacionados con los sentidos, con la meditación contemplativa del mundo, la meditación de las sagradas escrituras, la lectio divina, los distintos ritos matutinos y vespertinos, el silencio y la liturgia para terminar con una recapitulación a modo de síntesis de todo lo tratado.

La lectura de este libro puede ayudar a todos los lectores y lectoras a descubrir en sus vidas el espacio interior de quietud. No es necesario, nos dice el autor, que nos impongamos esforzadamente la calma. Está ahí, también dentro de nosotros. No espera más que a ser descubierta y sentida.

– Celedonio Martínez Daimiel

El arte de ser feliz

Grün, A.,

El arte de ser feliz

Sal Terrae, Santander, 2008, 141 pp.

«Todos los seres humanos quieren ser felices» (Platón). Es cierto, pero no todos escogen o encuentran el camino para serlo, pues muchos creen que para ser feliz hay que poseer muchas cosas. Y, entonces, la felicidad se aplaza, más y más, esperando conseguir la casa soñada, el coche del último modelo, un mejor trabajo…Pero, no; la felicidad completa no llega. Aunque se consiga todo lo añorado, que ya es difícil, sigue un gran vacío y las ansias de tener no se colman con nada. Y todo es simplemente porque se pone la fuerza en el tener y no en el ser. Tendríamos que tener muy en cuenta un pensamiento de Zig Ziglar: «Hasta que usted no sea feliz con lo que es, nunca será feliz con lo que tiene». La felicidad está dentro de cada uno, sólo hace falta abrir los ojos.

«El hombre es infeliz porque no sabe que es feliz. Sólo por eso…Quien se dé cuenta de ello será feliz de inmediato, en ese preciso instante» (Dostoievki).

«Ser feliz significa, nos dice Grün, estar en armonía conmigo mismo, estar por entero en el momento presente, permanecer en la quietud para poder vivir plenamente cada instante y estar abierto al milagro del encuentro, prestar atención a todo cuanto hago. La felicidad se expresa en la gratitud, en la serenidad y la libertad interior, en la alegría y el amor, en la salud y la satisfacción. Quien ejercite estas diez actitudes se sentirá feliz una y otra vez. Pero no poseerá la felicidad, porque ésta no se deja retener, sino que únicamente podemos percibirla por un instante. El presente libro no nos promete la vivencia de la felicidad, pero sí pretende mostrarnos un camino que puede llevarnos a tocar la felicidad en medio de los altibajos de nuestra vida, en los instantes luminosos y también en los instantes oscuros de nuestra existencia».

La felicidad no se compra, es un arte que hay que aprender. Para ello el autor propone diez actitudes que son las que desarrolla a lo largo del libro: alegría, amor, armonía, atención, encuentro, gratitud, quietud, salud, satisfacción y serenidad.

Todas estas actitudes son importantes, pero la más necesaria de todas, es sin duda, el amor. La felicidad está relacionada con la apertura a Dios y a los demás. El amor es uno de los factores más indispensables para conseguir la felicidad, pues «la vocación de todo hombre y de toda mujer es servir a otras personas» (Tolstoi) y «la mayor alegría en la vida, es darse a los demás» (M. Teresa de Calcuta). El darse a los demás es fuente de vida y felicidad. El que trata de ser feliz a solas, de vivir, no consigue nada. Sin embargo, quien no tiene miedo de perder su vida, dando la suya a los otros, es plenamente feliz. «Nadie tiene mayor amor que quien da la vida por sus amigos» (Jn 15,13).

– Eusebio Gómez Navarro

El Padre nuestro. Explicado con sencillez

González-Carvajal, L.,

El Padre nuestro.
Explicado con sencillez

Sal Terrae, Santander, 2009, 143 pp.

La oración del Padre Nuestro se reza con frecuencia de manera repetitiva por lo que en ocasiones puede llegar a convertirse en una oración mecánica y sin sentido para el que la recita. Para no caer en esta mecanicidad a la hora de hacer oración Carvajal, autor de esta obra, nos ofrece unas buenas y prácticas meditaciones sobre la oración dominical, la única que sepamos nos enseñó el mismo Cristo. Estas meditaciones tienen una gran base patrística y teológica, son actuales por que tienen un lenguaje sencillo al que puede acceder cualquier lector y están profundamente encarnadas en la cultura del tiempo actual. Y también podemos ver en cada meditación el reflejo de la imagen de un hombre orante que hace suyas las palabras que el mismo Jesús nos enseñó. Es un libro de sencilla lectura, pero profundo en sus meditaciones. Lo recomendamos para todas aquellas personas que deseen aventurarse a entrar por la puerta del castillo interior del alma que es la oración.

– Celedonio Martínez Daimiel

¿Por qué a mí? ¿Por qué ahora? Y ¿por qué no?

Gómez Navarro, E.,

¿Por qué a mí? ¿Por qué ahora? Y ¿por qué no?
sentido del sufrimiento

Desclée De Brouwer, Bilbao, 2009, 203 pp.

Preguntarse por el sentido del sufrimiento es a lo que nos invita el Carmelita Descalzo, Eusebio Gómez Navarro, en este último que libro que acaba de publicar.

Sabemos que el sufrimiento, nos dice el P. Eusebio, es algo real y concreto que se nos manifiesta en nuestro cuerpo, en nuestra mente y en el espíritu. Todos sufrimos de una manera o de otra y ante esta dramática realidad lo primero que deseamos saber es la causa de este dolor, de esta angustia, de este sufrimiento. Las preguntas más frecuentes son las de ¿por qué a mí?, por qué lo que me está pasando no le pasa a otra persona, qué es lo que yo he hecho mal para que Dios me castigue con esta pena. Otra pregunta frecuente ante el sufrimiento es la de ¿por qué ahora?, en este momento de mi vida cuando mejor estaba me llega este sufrimiento que me está destruyendo el alma y no me deja vivir tan bien como yo me había planeado. La respuesta a estas preguntas la podemos encontrar en otra pregunta y ¿por qué no?. Por qué no vivir el sufrimiento como una realidad salvífica, educadora y también sanadora. Es el sufrimiento vivido en su sentido más pleno el que fortalece al hombre y le ayuda a realizarse, porque el hombre no se destruye sufriendo, cita de Víktor Frankl, sino que se destruye por sufrir sin ningún sentido.

El contenido de esta obra se divide en cinco capítulos. En estos cinco capítulos el autor aborda el tema del sufrimiento desde el silencio de Dios, las actitudes que se han de tener ante el sufrimiento, el cristiano que sufre y la cruz, necesidad de superar el dolor y cómo hacerlo. En el último capítulo, me cubres con tu palma, se da una palabra de aliento ante todo sufrimiento humano mostrando la mano tendida de Dios, de María y de todos los hombres de buena voluntad que con entrañas de misericordia acompañan al hombre que sufre.

Es un libro de fácil lectura, sencillo en su contenido y lenguaje. Pero lo único que hemos echado en falta, y que sería a tener en cuenta, es la ausencia de notas a pié de página. Estas notas pueden ayudar al lector a completar su lectura consultando las obras de los autores citados en esta obra.

Este libro se ha escrito con gran cariño y respeto para todos los hombres y mujeres que pasan por el trance del dolor, con la única intención de llevarles un poco de luz, una gota de consuelo y un rayo de esperanza para sus vidas.

– Celedonio Martínez Daimiel

El don de ser tú mismo

Benner, G., D.,

El don de ser tú mismo.
Autoconocimiento como vocación y tarea

Sal Terrae, Santander, 2009, 126 pp.

Llegar al conocimiento de Dios es lo que siempre ha pretendido el hombre. Pero no se puede conseguir esa sabiduría del misterio más grande de la humanidad sin hacer un esfuerzo profundo por conocerse uno así mismo. Es necesario el autoconocimiento personal para llegar a comprender algo, no todo evidentemente, del misterio de Dios, a balbucear algunas cosas de lo que Dios es en su misma esencia.

Para hacer un análisis exhaustivo de la identidad cristiana es necesario dejarse guiar por especialistas en la materia. una de estas personas experimentadas es el psicólogo y acompañante espiritual David Benner, que en esta obra da luz a todos los que desean entrar en la espiritualidad del autoconocimiento en Dios.

Hacer un autoconocimiento de uno mismo revitaliza la vida espiritual y conduce a la persona hacia la consecuencia de un destino y de una vocación que nos son otorgadas exclusivamente por Dios. Es imprescindible que el hallar la verdadera identidad personal para encontrar en ella la presencia de Dios, y si encontramos a Dios, seremos capaces de desarrollar nuestra más auténtica identidad.

El libro que nos ofrece Benner trata principalmente sobre el viaje de la transformación que ha de hacer el hombre para lograr su verdadera identidad en Cristo y con ello vivir en plenitud su verdadera vocación. Esta obra ha sido dividida en seis capítulos; en el primero trata sobre la interdependencia entre el conocimiento de Dios y el conocimiento de uno mismo. Los siguientes capítulos están orientados en torno a las tres grandes necesidades que afronta todo cristiano que intenta ponerse al servicio de Dios. La necesidad de un conocimiento transformador en Dios, la necesidad de un conocimiento transformador de nosotros mismos y la necesidad de encontrar nuestra identidad, realización y vocación en ese nuestro yo que se encuentra oculto en Cristo.

– Celedonio Martínez Daimiel

Dios viene a nuestro encuentro

Avendaño, J.M.,

Dios viene a nuestro encuentro

Narcea, Madrid, 2009, 174 pp.

Este es un libro que hay que leerlo despacio, sin prisas; un libro para meditar y acercarse a Dios. Esta es la recomendación que hace, en el prólogo, Mons. J. M. López de Andujar. Dios viene en cada momento a nuestro encuentro. El se adelanta primero y quiere que conozcamos a Jesucristo, vida eterna (Jn 17, 3). Y desde Cristo, enraizados en él, podemos enfrentarnos a la vida. Él es nuestra vida, «nuestra esperanza» (Col 1, 27). José Mª Avendaño nos presenta a un Dios amigo de la vida, cercano, que camina a nuestro lado y nos acompaña en todo momento, especialmente en las horas bajas, en nuestros sufrimientos. Es un Dios que tiene un amor especial con los más pequeños y con aquellos a los que parece que todos desprecian. El libro está dividido en tres partes. La primera, Dios en el espesor de la vida, contiene relatos cortos que han encontrado la inspiración en la oración. Entre otros temas aparecen: Dios viene a nuestro encuentro / Quieres que te llamemos Padre / La sonrisa del icono / El colirio/ Hay ángeles entre nosotros / En sus ojos todos los pobres / El campo y sus trabajadores / ¿Cuándo estará mi alma transformada? / Mi hermano/ Presos/ Virgen María/ Dichosa tú que has creído…

En la segunda parte, La luz de Dios en la noche del espíritu recoge el testimonio de algunos santos y testigos del amor a Jesucristo. Entre ellos están: San Pedro Poveda / San Francisco de Asís / Madre Teresa / Carlos de Foucauld / Santa Teresa del Niño Jesús / Santa Maravillas de Jesús / San Benito Menni… En la tercera parte, Dios en la oración de cada día, aparecen oraciones formuladas en diversas situaciones: Santificado sea tu Nombre, Señor / Que no me cierre a tu Gracia / Vivir amando / Vengo de celebrar la Eucaristía / Salgamos a la vida / Convencido de tu amor / Al final sólo queda el amor / Que no pasemos de largo ante los pobres / A la luz de la luna/ Las ascuas…

Las páginas de este libro son, pues, una mirada de fe que ayuda a ver la presencia de Dios en todo lo creado, a rastrear las huellas que Dios nos va dejando para que le busquemos y, sobre todo, para que le encontremos. Esto se puede lograr, sin duda, con una mirada al mundo desde Dios, con la fuerza de la Eucaristía y de la oración.

José María, licenciado en Teología Práctica, autor de varios libros y artículos, nos presenta en la conclusión el objetivo del libro. Dice que en estas páginas ha querido mostrarnos que podemos y debemos ayudarnos a entender el sentido de la vida y que Jesús nos invita a ser sus amigos, a vivir con él.

– Eusebio Gómez Navarro